A la hora de pensar en la iluminación de nuestras cocinas siempre tenemos en cuenta dos factores: el diseño y la funcionalidad. Las luces las necesito para trabajar pero esto no puede estar reñido con un diseño que vaya con tu estilo y crear el ambiente que deseas.
Hoy en día hay una gran variedad de modelos en el mercado adaptados a cada situación.
- Lo primero es aprovechar al máximo la luz natural que entra por las ventanas jugando con la distribución del mobiliario. Por este motivo evitaremos colocar muebles que impidan el paso de luz en nuestra cocina.
- La iluminación de techo es la más habitual, una opción son los focos que pueden ser empotrados o de superficie. Puede encontrarse con una gran variedad de formas (redondos, cuadrados, rectangulares, de colores y más) y se utilizan tanto con lámparas de bajo consumo como con las de leds.
- Para la zona de comedor podemos optar por lámparas suspendidas para crear un ambiente acogedor que dé pie a tertulias y reuniones.
- Para la zona de encimera debemos tener un mayor cuidado. Es la superficie de trabajo y debe estar correctamente iluminada. Lo aconsejable es colocar puntos de luz bajo los muebles superiores. Aquí tendríamos la posibilidad de elegir tanto leds como fluorescentes.
- LEDS: Son de bajo consumo y gran durabilidad, impidiendo que se creen sombras. Este tipo de luces aparecen en tiras o bien en formato foco.
- FLUORESCENTES: Al igual que los Leds se colocan bajo los colgantes dando claridad a la superficie de trabajo, algunos modelos ofrecen la posibilidad de ganar un enchufe que siempre se agradece para el pequeño electrodoméstico.
- Las luces adicionales. Esos detalles que nos facilitan el día a día en nuestra cocina. Qué me decís de esas luces que se encienden al abrir los cajones y los armarios, las referencias de luz en los zócalos.
- Pásate por nuestra tienda de Gros, en la calle Secundino Esnaola 14 de Donostia – San Sebastián.
